Abrir un restaurante implica mucho trabajo, dinero y esfuerzo. Tener en claro qué tipo de negocio vamos a iniciar es uno de los pasos más importantes. Cuando el concepto está claro, decidir el menú, decoración, mobiliario y ambiente es mucho más sencillo.

Es recomendable empezar con un menú pequeño. No sólo nos permite especializarnos en ciertos platos y mejorar constantemente, también reduce en gran medida los costos operativos de los primeros meses.

Para vender productos de calidad, nuestros insumos deben estar a la altura. Una de las más importantes es la vajilla: no sólo debe verse bonita, también debe resistir el uso rudo de la cocina. Esta compra requiere tiempo, pues es una inversión a futuro y necesitará reposiciones con el paso de los años. Éstos son algunos consejos a tomar en cuenta durante la búsqueda:

  • Tener muy claro nuestro presupuesto y buscar opciones que se ajusten a él
  • Saber qué tipo de comida vamos a servir, así escogerás las piezas correctas para que luzcan tus platillos
  • Acercarnos con nuestro proveedor y pedir asesoría por el tipo de vajilla ideal para nuestro negocio (de cerámica, porcelana o peltre)
  • Asegurarnos de que el modelo tenga garantía de permanencia en el mercado, porque necesitaremos reponer piezas mínimo una vez cada año
  • Elige piezas versátiles que puedan usarse con distintos platillos, te recomendamos la vajilla blanca porque el color combina con todo, y nunca pasa de moda
  • Toma en cuenta los tiempos de entrega y formas de pago

Esta decisión puede ser larga, pero es muy necesaria debido a que te asegura parte del éxito con tus clientes. No olvides que tu proveedor se convertirá también en tu socio y debes estar contento con el servicio que te brinde. ¡Buena suerte!